El proyecto que generó rechazo inmediato
El oficialismo había enviado al Concejo Deliberante un paquete fiscal que incluía, por primera vez en la historia de Rojas, una tasa municipal de $50 por cada litro de combustible cargado en las estaciones de servicio locales. La iniciativa también contemplaba aumentos en la tasa de alumbrado público y una baja de alícuotas a la multinacional Bayer.
Desde el bloque peronista denunciaron que la medida representaba “meterle la mano en el bolsillo a los vecinos para beneficiar a unos pocos” y cuestionaron que el proyecto ni siquiera hubiera pasado por comisión, ya que “ni los concejales oficialistas estaban de acuerdo”.
Bouvier reconoció el error y retrocedió
En un comunicado difundido este viernes, el intendente Román Bouvier anunció la decisión de retirar por completo la tasa al combustible:
“Escuché las inquietudes de vecinos, comerciantes, trabajadores y familias que expresaron su preocupación. Entendí que, más allá de la intención, esta no era la medida adecuada para este momento”.
El jefe comunal explicó que el objetivo original era “fortalecer el financiamiento del Hospital Saturnino E. Unzué y asegurar la continuidad de los servicios esenciales”, pero aceptó que “gobernar implica hacerse cargo, evaluar el impacto real de cada medida y corregir cuando corresponde”.
Críticas opositoras y alivio en el sector comercial
Desde el peronismo local celebraron la marcha atrás y recordaron que habían advertido la situación “desde hace varios meses”. Comerciantes y estacioneros, que temían una caída en las ventas por el encarecimiento del combustible, expresaron su satisfacción por la rápida respuesta.
Bouvier cerró su mensaje reafirmando que “cuidar la salud, garantizar servicios de calidad y mantener un Estado eficiente” siguen siendo la prioridad, y prometió buscar “alternativas que cuiden al mismo tiempo a las familias, al comercio y a los sectores productivos de Rojas”.
El proyecto será retirado formalmente del tratamiento en el Concejo Deliberante en los próximos días.
