26/11/2025 | 16:15         
REGION-PROVINCIA
Whirlpool cierra su planta en Pilar y despide a 220 empleados
La fábrica inaugurada en 2022 con una inversión de US$50 millones deja de producir en Argentina por la caída de ventas y el aumento de importaciones más baratas
Whirlpool cierra su planta en Pilar y despide a 220 empleados

Whirlpool Argentina anunció este miércoles el cierre definitivo de su moderna planta industrial ubicada en el parque industrial de Pilar, provincia de Buenos Aires, lo que implica el despido de 220 trabajadores de un total de 330 que tenía la fábrica.

La decisión, comunicada de manera sorpresiva a los empleados en el comedor de la planta, se fundamenta en la fuerte caída de las ventas y en la competencia de productos importados —principalmente chinos— que ingresan al país a precios sensiblemente más bajos.

De la euforia de 2022 al cierre en menos de tres años

La planta, inaugurada en julio de 2022 tras una inversión de 50 millones de dólares, era considerada la fábrica de electrodomésticos más moderna del mundo por la propia compañía. Con 30.000 m² cubiertos, tenía capacidad para producir un lavarropas cada 40 segundos y llegar a 300.000 unidades anuales, con el 70 % destinado a exportación.

Sin embargo, la producción diaria de lavarropas cayó de 600 a solo 400 unidades en los últimos meses, según relataron los operarios.

Qué pasa ahora con los empleados y la planta

La empresa comenzó negociaciones con la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) para definir el paquete de salida, que incluirá la indemnización legal más un plus adicional. Los representantes sindicales pidieron que parte del personal sea reubicado en tareas de despacho del stock remanente.

Whirlpool mantendrá su oficina comercial y centro de distribución sobre la Ruta 8, donde continuarán trabajando 110 empleados. Fuentes del sector aseguran que la compañía pasaría a importar la totalidad de los productos que vende en Argentina desde otras plantas del grupo en el mundo.

El testimonio de los trabajadores

“Veníamos produciendo normalmente hasta ayer. Hoy nos citaron al comedor y nos comunicaron el cierre. El director dijo que bajó mucho el volumen de venta y que estamos sobrestockeados”, relató Ignacio Cabezas, uno de los operarios afectados, en diálogo con medios locales.

“Nos explicaron que les sale más barato importar que fabricar acá”, agregó Cabezas. Un lavarropas Whirlpool de 7 kg cuesta cerca de 900.000 pesos, mientras que modelos chinos de características similares se ofrecen a menos de la mitad.

El cierre impacta directamente en 220 familias de Pilar y la zona norte del Gran Buenos Aires, y se suma a otros anuncios de suspensiones y despidos en el sector metalúrgico durante las últimas semanas.