Una bienvenida cargada de emoción en Fontezuela

Este viernes 7 de noviembre a las 16 horas, Catalina Maglio, la niña de 10 años gravemente herida en una explosión durante una feria de ciencias, regresó a su hogar en Fontezuela, partido de Pergamino. Los 400 habitantes del pueblo la esperaron con banderas, carteles y una caravana que acompañó su llegada, según informó El Diario El Norte.

El accidente que conmocionó a Pergamino

El 9 de octubre, una maqueta que simulaba la erupción de un volcán explotó en el Instituto Comercial Rancagua. Una esquirla metálica impactó en la cabeza de Catalina, causándole lesiones gravísimas. Fue asistida primero en Pergamino, luego en el Hospital San Felipe de San Nicolás y finalmente trasladada al Hospital Garrahan, donde permaneció veinte días internada, muchos de ellos con asistencia respiratoria.

Un saldo trágico y una investigación en curso

El siniestro dejó 17 personas heridas, entre ellas una docente que perdió un ojo y sufrió quemaduras en una mano. La Justicia y las autoridades educativas mantienen abierta la investigación para determinar las causas y revisar los protocolos de seguridad en actividades escolares.

El deseo de volver a casa

Para Ángeles y Javier, padres de Catalina, regresar a Fontezuela era el gran objetivo. “Queríamos llegar lo antes posible porque ella quería volver al pueblo, a su pueblo”, contaron a La Opinión. El recibimiento los desbordó: “No esperábamos tanto. No fueron solo sus compañeros, fue todo el pueblo”, expresó Javier, destacando el apoyo constante durante la internación.

Una recuperación que sorprende

Los padres definieron el último mes como de “mucha lucha”, pero resaltaron la fortaleza de su hija. “Llegó muy grave, pero los médicos actuaron rapidísimo y excelente”, afirmaron. Catalina salió de terapia intensiva en pocas semanas y recibió el alta. Aunque restan cirugías reconstructivas, su padre aseguró: “Ella tiene una fuerza interior que no podemos creer. Tiene más fuerza que nosotros”.