Con miles de especies para disfrutar, la observación de aves sigue incrementándose en el país. Y puntualmente a Reserva Natural Municipal Punta Rasa es en un lugar ideal dentro de la provincia de Buenos Aires para hacerlo. Es un sitio donde el Río de la Plata se encuentra, y no solo se pueden apreciar las aves migratorias que llegan desde distintos rincones del mundo, sino también delfines y lobos marinos.
Punta Rasa, a 10 kilómetros de San Clemente del Tuyú, es una lengua de arena de doble naturaleza que al internarse en el agua, por un lado constituye el extremo sur de la Bahía de Samborombón, y por el otro se presenta como el extremo norte del Cabo San Antonio, siendo testigo cómplice del extraño choque del río y el mar, de su confusión, mezcla y mutua disolución.
Cada año, miles de aves playeras y migratorias llegan a esta región para alimentarse o reproducirse, incluyendo chorlos, playeros, gaviotines y muchas otras especies. En los pastizales y lagunas cercanas es posible ver especies típicas del pastizal pampeano.
También hay tres especies distintas de cangrejos, que son fuente de alimento para muchas de esas aves. Pero además, entre las olas pueden divisarse delfines, toninas y lobos marinos de dos pelos.
Uno de los sectores más llamativos en Punta Rasa es justamente la punta, una lengua de arena que penetra en el mar. Sobre la costa hay senderos, pasarelas y miradores para disfrutar del ecosistema que se forma donde el mar choca con el Río de la Plata y de los humedales.
También se puede contemplar la fauna y la flora del lugar, formada principalmente por juncales y pajonales. Y muchos lo elijen para pasar un día al aire libre, disfrutar las playas, practicar deportes como kitesurf o pescar. (DIB)