El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, participó de la inauguración del Laboratorio de Micropropagación Vegetal (LMV), en la localidad de Mercedes, cuya tecnología de punta permitirá la producción masiva de plantas de calidad, libres de enfermedades. Estuvieron también el ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez; la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez; y el intendente local, Juan Ignacio Ustarroz.

Kicillof destacó que “mucho de lo que se ha desarrollado en la Argentina con diferentes cultivos tiene origen en las chacras experimentales y en el sistema científico y tecnológico del Estado” y añadió que “es una inversión muy importante por parte del sector público que luego puede adoptar el sector privado para crear más trabajo, bienestar e ingresos para nuestro país”.

“Con este laboratorio en el que se pueden crear plantas in vitro para controlar mejor la calidad, podemos multiplicar la escala de producción a una escala nunca antes vista”, sostuvo el mandatario, al tiempo que valoró que “es una muestra de la extensión desde lo científico a lo productivo para la fabricación de manera eficaz y mucho más rápida”.

Con una inversión de 58 millones de pesos, el laboratorio fue comprado a la empresa misionera de mayoría estatal Biofábrica Misiones y servirá para sustituir importaciones; multiplicar en gran escala las plantas con calidad controlada; desarrollar nuevas variedades e innovaciones; acelerar la finalización de investigaciones mediante experimentos de campo; y ampliar la oferta de especies con baja disponibilidad de semillas.

Por su parte, el ministro Rodríguez indicó que “el sector público cumple un rol estratégico para impulsar la innovación tecnológica y, a partir de ella, la producción agropecuaria”, y agregó: “Llevamos a cabo un trabajo cotidiano desde el primer día, en el que nos propusimos fortalecer las 14 chacras experimentales que estaban prácticamente abandonadas y que hoy brindan resultados para acompañar a los productores”.

Por su parte, Ustarroz remarcó “la importancia de poner a la ciencia y la tecnología al servicio de la producción, el empleo y el desarrollo, estableciéndola junto a la educación como uno de los pilares centrales de nuestra sociedad”. (DIB)