(DIB).- La oposición peronista en la Legislatura bonaerense pidió la creación de una comisión bicameral para el seguimiento de las paritarias docentes, con el objetivo de tener un "control directo" de las conversaciones y poder convocar a funcionarios a informar sobre las mismas.
El proyecto, presentado en Diputados, fue originalmente propuesto por el kirchnerismo, pero luego sumó las firmas del massista Pablo Garate, de Patricia Moyano, del "bloque de los intendentes" del PJ, y Rocío Giaccone, del Frente Amplio Peronista.
El cuerpo tendrá por objeto "el seguimiento de la paritaria docente", que consistirá en "llevar a cabo un control directo y permanente sobre las reuniones, medidas y resoluciones que se desarrollen en el marco de la negociación".
De este modo, las diferentes variantes del peronismo buscarán meterse en uno de los conflictos de mayor volumen político de la administración de María Eugenia Vidal, que también buscará obtener rédito del conflicto, en un año electoral.
En efecto, uno de los artículos del proyecto le permite a la Bicameral solicitar información sobre la marcha de las paritarias y hasta convocar a ministros, representantes sindicales y miembros de la comunidad educativa.
En los fundamentos de la iniciativa, los legisladores utilizan la creación de las mesas distritales impulsadas por el Gobierno para sumar a padres y dirigentes políticos a la discusión salarial: señalan que, en palabras del presidente de Diputados, Manuel Mosca, Vidal les pidió a los legisladores "un rol activo" en esos espacios. "Consideramos fundamental la participación de los legisladores en su totalidad y no solo del oficialismo", indicaron.
El cuerpo, según la iniciativa del peronismo deberá estar compuesta por cuatro senadores y ocho diputados. En los fundamentos de la iniciativa se sostiene que "el Estado provincial no ha podido negociar con los docentes generando un incremento en los rasgos de la conflictividad laboral en el área educativa durante el período 2016-2018".
Además, cuestiona "el comportamiento de la gobernadora María Eugenia Vidal, compulsivo en el acuerdo salarial, incrementando aún más la conflictividad, puesto que se redujeron y ajustaron recursos económicos, y se avanzó en la institucionalización del aumento compulsivo sin mediar negociación".
