4/2/2017 | 09:57         
LOCAL
Informó Clyfer sobre daños provocados por las tormentas
Según estimaron, el servicio está brindándose prácticamente en un ciento por ciento, aunque en algunos lugares de manera muy precaria. También hay lugares que están sin tensión, pero se abastece a los usuarios llevando energía desde otros puntos. Hablan Rubiolo y Pérez.
Informó Clyfer sobre daños provocados por las tormentas

Las tormentas ocurridas a fin de año y luego a mediados de enero produjeron serios daños a la red de distribución de energía eléctrica, una situación en la que la Clyfer aún trabaja para terminar de solucionar.

La tormenta de fin de año se desató poco antes de la hora 24 del 31 de diciembre pasado, lo cual para muchos rojenses implicó recibir al año nuevo a oscuras y, en varios casos, también lidiando contra el agua que inundó calles y viviendas.

Dicha interrupción en el suministro de energía se produjo, según informó el ingeniero Ricardo Rubiolo (a cargo de la Oficina Técnica de la cooperativa) "a raíz del corte del alimentador número 4, que afectó a media ciudad. Los problemas fueron un cable cortado a la salida de la estación transformadora; un aislador en Fortín Mercedes, cerca de AFA; y un árbol que se cayó dentro de las instalaciones de la fábrica Almar".

"Todos esos sucesos se produjeron simultáneamente, y por eso estuvimos tanto tiempo sin servicio, entre las 23 del día 31 hasta prácticamente las 4 de la mañana del 1 de enero", agregó Rubiolo.

Aclaró el profesional que "estos son los problemas que tuvimos dentro de la ciudad, porque en la zona rural hubo muchos más. La Beba, Rafael Obligado, y muchos otros puntos de la parte rural del distrito se vio afectada por culpa de los rayos y otros fenómenos atmosféricos".

Estos problemas se verían potenciados dos semanas después, cuando una lluvia por demás copiosa y que afectó a todo el centro del país provocó inundaciones, con su consecuente caída de columnas del tendido eléctrico, cables cortados y demás.

En cuanto a los daños producidos, consideró Ricardo Perez (también de la Oficina Técnica de Clyfer) que "además de los postes caídos, el grave problema que tenemos es que las inundaciones no nos permitieron entrar a muchos lugares para restablecer el servicio como corresponde. El piso es barro, y así es imposible "plantar" bien una columna. Hay que ir solucionando los problemas como se puede, y mientras esperar a que las condiciones mejoren para poder hacer bien los trabajos, a fondo".

"Hay muchos lugares a los que se puede acceder por determinados caminos, pero nosotros no podemos elegir; tenemos que ir por donde va la línea, y ahí es donde aparecen los problemas. Hay muchos lugares a los que no podemos entrar, porque las líneas pasan por campos, por montes, por todas partes. Tuvimos problemas durante varios días en Rafael Obligado porque hay un monte a la vera del río Rojas, con ramas que se meten entre la línea y producen cortes.

En el estado de crecida que estaba el río era imposible entrar. No obstante, tirando grúas, rompiendo vehículos, hicimos lo posible para solucionar el problema. La gente no tiene por qué saber todo esto, pero la verdad es que hay veces que no tenemos más remedio que esperar", añadió Perez.

Rubiolo también se refirió a problemas originados en barrio Santa Teresa, más concretamente sobre calle Betbezé, que está cerca del río y, de manera preventiva, debieron retirar algunos medidores para impedir riesgos en caso de inundación.

No obstante, el problema mayor sigue estando en la zona rural. La Clyfer sigue trabajando para solucionar estos problemas. "Hay lugares a los que todavía no podemos entrar; y a otros llegamos pero no hay "piso" como para poder enterrar un poste y que quede parado. Vamos tratando de solucionar a medida que se puede, reemplazando postes en Rojas, también en Carabelas, procurando hacer todo con la mayor rapidez posible. Lo mismo ocurre con el alumbrado público, en el que tenemos varias luminarias apagadas y estamos tratando de restablecer el servicio lo antes posible", sostuvo Rubiolo.

Según estimaron, el servicio está brindándose prácticamente en un ciento por ciento, aunque en algunos lugares de manera muy precaria. También hay lugares que están sin tensión, pero se abastece a los usuarios llevando energía desde otros puntos.

"Estamos tratando de solucionar todo con la mayor seguridad; no vamos a dar servicio si no tenemos seguridad eléctrica", finalizó diciendo Rubiolo.