DE LA OPINIÓN -  Efectivos o no, dado que el tránsito no muestra signos de mejoría, los controles viales algún resultado arrojan: concretamente, miles de motos secuestradas, en su mayoría por estar “flojas de papeles”. El problema es que la acumulación de estos rodados genera un nuevo inconveniente, esta vez en el seno de la administración: la falta de espacio para alojarlas. 

En virtud de ello, la Agencia Vial aguarda respuestas de los organismos competentes para poder iniciar otra etapa de compactación dado que son más de 5.000 las motos que se encuentran secuestradas en los galpones que Inspección General tiene en el predio ferroviario ubicado en la intersección de las calles Nicolás Repetto y Tucumán.  

El secretario de Gobierno, Pablo Mazzei, explicó: “Estos rodados fueron retenidos en los últimos años y que esta semana, previo al desguace, se estuvo separando lo que es cubiertas y plásticos con el objetivo de facilitar la tarea de compactación que se llevará a cabo en los próximos días”. 

Asimismo informó que se continuará con la compactación de las demás unidades y que:  “Inmediatamente finalizada la primera etapa, con el doctor Ramiro Llan de Rosos, de la Subsecretaría Legal y Técnica, se comenzó a trabajar con todas las motos retenidas en el período 2010 - 2011, acción que se ejecuta en la actualidad”. 

“Tenemos alrededor de 5.000 motos retenidas, muchas de las cuales tienen problemas de documentación y sus dueños no vinieron nunca a retirarlas; a su vez, otras motocicletas están preparadas para correr ‘picadas’, es decir para poner en riesgo la vida de quienes la conducen, la vida de quienes transitan y además provocar ruidos molestos”, expresó.

 

COMPACTACIÓN

El procedimiento de la compactación es la parte final de un trámite que se inicia con los operativos de control de tránsito en los cuales se procede a la retención del vehículo por violación a alguna norma de la Ley de Tránsito.

Con esta acción se inicia un expediente importante en el Juzgado de Faltas, luego sobreviene la sentencia y transcurrido un año de dictada la misma, y sin que el propietario del vehículo haya concurrido a retirarla, previo cancelar la multa (ya sea en un pago o a través de convenio), la Municipalidad de Pergamino dispone el decomiso. “Esto significa la incorporación del vehículo secuestrado a la Comuna pero en este caso se dispuso que por la antigüedad de los mismos lo más conveniente es la compactación”, indicó Mazzei. 

 

OPERATIVOS, NO CACERÍA

Continuando con la política para el ordenamiento del sistema de tránsito, los agentes de Inspección y las fuerzas policiales interceptan vehículos para identificarlos; asimismo, el titular de Gobierno agregó que “se ejecuta un monitoreo en distintas zonas para constatar si se transgredieron los códigos de contravención y, en caso de suceder esto, se procede a labrar el acta de infracción. Seguiremos en la calle, no dejaremos de lado las tareas que estamos realizando en los barrios y en eso se mantendrán las acciones que venimos desplegando”, advirtió Pablo Mazzei. 

“Labramos infracciones con los inspectores de nuestras dependencias en zonas donde se producen numerosas faltas, no perseguimos a nadie, lo que hacemos es colocarnos en distintos lugares para hacer cumplir las mismas legislaciones que se hacen cumplir en otros puntos del país. Muchas personas que en la ciudad no respetan las leyes, en otras localidades son las primeras en acatar las órdenes que se establecen porque las normativas de tránsito son las mismas en todos lados”, aclaró el secretario de Gobierno.  

 

QUÉ SE PIDE

Los inspectores piden la documentación de los rodados, tarjeta verde (o azul), licencia de conductor, última patente paga, constancia de seguro y Verificación Técnica Vehicular en el caso de los autos; y a los conductores de motocicletas se les exige registro, chapa patente, tarjeta verde y uso de casco, y ahora el cumplimiento de las recientes normativas vinculadas con los chalecos refractarios con el número de dominio.